COMPORTÉMONOS SABIAMENTE.

Paso a Paso a la Eternidad.

COMPORTÉMONOS SABIAMENTE. Vivir de acuerdo a la voluntad de Dios, para la mayoría de nosotros es difícil y complicado, a pesar de que llevamos muchos años de haber aceptado a Cristo Jesús como nuestro Señor y Salvador. Por la falta de madurez en nuestra relación con Dios, y al no tener dominio propio de nuestro ser, fácilmente nos dejamos influenciar por los hábitos y comportamientos de la sociedad en que vivimos. Esta influencia negativa, hace que nuestro comportamiento en presencia de las personas inconversas no sea ejemplar de un seguidor de Cristo. El apóstol Pablo nos exhorta a que nos comportemos sabiamente en nuestra vida cotidiana: “Compórtense sabiamente con los no creyentes, y aprovechen bien el tiempo.” Colosenses 4:5 DHH. El comportamiento de los seguidores de Cristo, diariamente es puesta bajo la lupa de los inconversos. Ellos cuidadosamente observan cada paso que da el cristiano, para ver sus errores y tener motivos para desacreditarlos en público. El maligno utiliza a los inconversos para desacreditar a los cristianos, y de esa manera también para desacreditar a Cristo Jesús. y el evangelio. Por eso el apóstol Pablo exhorta a todos los cristianos para que se conduzcan sabiamente en presencia de los inconversos, para que ellos no tengan motivos para injuriarlos. El testimonio del cristiano debe ser irreprensible como lo fue el testimonio de Cristo. Diariamente debe procurar que su comportamiento ante el mundo sea en conformidad a las Sagradas Escrituras, y así, llamar la atención de los inconversos para que se acerquen a los pies de Cristo. Además, el apóstol Pablo alienta a todos los cristianos para que aprovechen al máximo las oportunidades que se les presenten para dar testimonio del poder salvador del Señor Jesucristo a los inconversos. Atendiendo a la exhortación del apóstol, nosotros debemos andar sabiamente, no solo en presencia de los inconversos, sino en todo momento, ya que nosotros somos los representantes de Cristo en este mundo, y nuestro comportamiento testifica si fuimos o no realmente transformados por el poder de su Palabra. Solo llevando una vida sabia en conformidad a la voluntad de Dios, aprovecharemos la oportunidad para que el no creyente pueda ver una forma de vida diferente, no solamente llenos de virtudes positivas, sino llenos de acciones sabias. A pesar de que nuestro comportamiento testifica a Cristo al inconverso, también debemos sacar el mayor provecho de las oportunidades que se nos presenten para contarles las buenas nuevas de salvación. Recuerde: La reputación del evangelio dependerá de la vida que llevemos, ya que nuestro testimonio es el único evangelio visible para el mundo pecador.